Los Institutos Tecnológicos fueron creados en 1948 para cubrir una necesidad, la falta de técnicos profesionales en todos los estados de la República, los cuales para prepararse tenían que emigrar a la ciudad de México para estar en contacto con las disciplinas del área de Ingeniería.
Los Institutos Tecnológicos responden, asimismo, a la estratégia de desconcentrar geográficamente la educación tecnológica, no solo para atender la demanda de la sociedad en este campo, sino para propiciar el arraigo de los egresados, integrándolos a la vida productiva de sus localidades.
Actualmente, el Sistema de Institutos Tecnológicos cuenta con un modelo académico que se caracteriza por tener planes de estudios reticulares, con un sistema semestral de créditos que permite, por una parte, que los estudiantes realicen sus estudios según su tiempo y necesidades y, por otra, que tengan movilidad interinstitucional.
Organizacionalmente, los Institutos Tecnológicos forman parte del Sistema Nacional de Educación Tecnológica, dependen de la Secretaría de Educación Pública a través de la Secretaría de Educación e Investigación Tecnológicas, bajo la coordinación de la Dirección General de Institutos Tecnológicos, la cual es el órgano rector que norma a los:
La oferta educativa se integra con:
Además existen: